Es imposible cerrar los ojos a lo que está sucediendo en Alemania y extendiéndose por la Europa Occidental. Los “Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente” (Pegida) bajo la consigna de frenar lo que catalogan abuso al derecho de asilo y la amenaza a la cultura alemana, ya cuentan con casi 160 mil seguidores en Facebook. El movimiento que nació en Dresden a fines del año pasado ha conquistado seguidores en Düsseldorf, Kassel, y ya llegó a Viena.
El atentado del 7 de enero en París contra Charlie Hebbo sirvió para acentuar el miedo y rechazo contra el Islam y, de esta forma, validar las razones de Pediga, que contó en su última manifestación con 25 mil personas apoyando su causa. Este fortalecimiento de la islamofobia provocó, así mismo, la creación de movimientos en contra. Sin ir más lejos en Karlsruhe se llevó a cabo la manifestación contra Kargida donde participaron, en una gélida y lluviosa tarde, mil personas.
¿Por qué Pegida tiene tantos seguidores?, ¿Quiénes son ellos? ¿Es justificado su miedo? Son preguntas que han nacido tras estos sucesos. En los medios se han analizado datos sobre la real presencia del Islam en Alemania y se ha hablado hasta el cansancio sobre la instrumentalización del movimiento. Alarmante es que los hooligans, neonazis o representantes del partido anti-euro jueguen con el temor de la gente para validar su mensaje, pero también es preocupante que nos entretengamos en este juicio al otro sin reparar en el gran enemigo que es la desinformación.
El tul cubriendo la cabellera de las mujeres, el burkini en los balnearios de Berlín, el caftán o el Ramadán nos parece tan extraño, a veces incomprensible. Es el temor a lo desconocido lo que nos llena de prejuicios, nos sumerge en la ignorancia y nos termina separando, aferrándonos a lo conocido a lo que nos da seguridad.
Desde La Butaca los invitamos a reflexionar, a mirar al de al lado como un igual y a dar el paso para conocernos mejor.
El atentado del 7 de enero en París contra Charlie Hebbo sirvió para acentuar el miedo y rechazo contra el Islam y, de esta forma, validar las razones de Pediga, que contó en su última manifestación con 25 mil personas apoyando su causa. Este fortalecimiento de la islamofobia provocó, así mismo, la creación de movimientos en contra. Sin ir más lejos en Karlsruhe se llevó a cabo la manifestación contra Kargida donde participaron, en una gélida y lluviosa tarde, mil personas.
¿Por qué Pegida tiene tantos seguidores?, ¿Quiénes son ellos? ¿Es justificado su miedo? Son preguntas que han nacido tras estos sucesos. En los medios se han analizado datos sobre la real presencia del Islam en Alemania y se ha hablado hasta el cansancio sobre la instrumentalización del movimiento. Alarmante es que los hooligans, neonazis o representantes del partido anti-euro jueguen con el temor de la gente para validar su mensaje, pero también es preocupante que nos entretengamos en este juicio al otro sin reparar en el gran enemigo que es la desinformación.
El tul cubriendo la cabellera de las mujeres, el burkini en los balnearios de Berlín, el caftán o el Ramadán nos parece tan extraño, a veces incomprensible. Es el temor a lo desconocido lo que nos llena de prejuicios, nos sumerge en la ignorancia y nos termina separando, aferrándonos a lo conocido a lo que nos da seguridad.
Desde La Butaca los invitamos a reflexionar, a mirar al de al lado como un igual y a dar el paso para conocernos mejor.